22 de febrero: CASARABONELA - SIERRA BLANQUILLA

Participantes: Nori, Luis, Pili, Paco Ponferrada, Jesús R., Fuensanta, Paco Zambrana, Manuel de Nerja, Luci, Manu, Carlos, Paco Ruiz, Ricardo y Jesús C.

Distancia recorrida: 17 km.

Desnivel acumulado: 1220 m

Felicidades al Ayuntamiento de Casarabonela por la iniciativa de limpiar las veredas de su término municipal.

Desayuno en la panadería-pastelería de Casarabonela. Aceptable pan. A 2,50€

Bienvenida, Fuensanta, cuando vengas de Londres, si tienes ganas de caminar, serás bien recibida en la Vinoteca.

Se había propuesto la sierra de Casarabonela, pero sin ninguna concreción más. En el desayuno salieron a colación las tres posibilidades que se nos ocurrieron:

Puerto de la Madera-Vivero-Puerto Martínez-Pico del Grajo

Puerto de la Madera-Pico de la Prieta

Puerto de la Madera-Sierra Blanquilla

Después de sucesivos encogimientos de hombros, y de varias respuestas del tipo “a mí me da igual”, “una llanita y cortita”, etc. salimos hacia el puerto de la Madera porque todas pasaban por allí y ya decidiríamos en el puerto.

Seguimos el recorrido acostumbrado saliendo del pueblo por el cementerio y siguiendo por el arroyo para salir al llano de Cristóbal. Desde él podíamos continuar bien por la senda de la Jácara, bien por la de la fuente del Hornao, pero cuando llegaron al llano los últimos los primeros ya habían cogido hacia la fuente del Hornao y habían decidido el camino por todos. La mañana estaba serena, límpida, cálida, deliciosa.

Llegando al llano de la Morena bajaba un señor, ya de cierta edad, deprisa. “Vaya, este a madrugado, pues viene de vuelta”, pensamos. Venía preguntando por una gorra que había perdido. Cuando le dijimos que no la habíamos visto decidió regresar a reunirse con su grupo.

La fuente del Hornao está limpia de zarzas, como nunca. Además están limpias todas las veredas del término municipal de Casarabonela, al menos todas por las que caminamos.

En el llano de la Chacha, en el carril, estaba el grupo del de la gorra aguardándole. Por lo visto el de la gorra había tomado el desvío a Sierra Prieta poco antes de la fuente del Hornao. Como el reencuentro entre ellos no era problema nuestro seguimos hacia el puerto de la Madera. Según íbamos subiendo el levante iba arreciando.

Al llegar al puerto de la Madera nos juntamos con otro gran grupo que iban al pico de la Prieta. El vendaval nos ayudó a decidir la ruta. Evitamos la Prieta con su cresta inhóspita, azotada por todos los vientos y nos dirigimos hacia la Blanquilla por la abrigada senda protegida por los tajos de la Prieta. Hemos pasado por esta zona mil veces, pero siempre nos alegra por lo bonita que es. Están los enormes tajos, el pinar, la recoleta sendita sorteando los barranquillos que caen de la Prieta, y las preciosas vistas a todo el valle del río Turón.

En los arces de la cañada que viene desde el puerto de la Cabrilla paramos al Ángelus. Buscamos el solecito y hubimos de abrigarnos bien porque el viento venía fresco. Cuando nos levantamos se oían voces de un grupo de caminantes que venían hacia nosotros desde el puerto de la Madera, de modo que nos apresuramos para salir justo antes que ellos.

En el mojón de los Tres Términos o puerto de los Amoladores, poco antes de la valla de los pinsapos, se acabó la limpieza de la vereda y empezamos a sufrir los pinchazos de las aulagas, sobre todo por la umbría del pinsapar hasta el puerto de la Blanquilla. Más allá, no es que la senda estuviera arreglada, pero como no hay matorral, no había pinchazos.

En la subida a la Blanquilla nos extrañó no ver al grupo que venía tras nuestra. “Se habrán vuelto o habrán parado” pensamos. Terminamos el ascenso a la Blanquilla temiendo el azote del viento en ese lapiaz desprotegido de la cima. Sorprendentemente, había zonas donde no soplaba. Sí pegaba bien el viento en la cima donde está el enorme hito de piedras y en la que da vistas al Burgo. Esta cima es mucho más bonita que la del hito porque tiene unas preciosas vistas hacia Grazalema con su sierra del Pinar, al Burgo con su campiña de almendros, olivares y tierra calma, y debajo de los impresionantes tajos en los que nos encontrábamos, a los cerros de la Villa y de Morototón.

Poco tiempo estuvimos en la Blanquilla. El viento nos obligó a marchar. Cuando salíamos del lapiaz llegaba el grupo que nos había alcanzado en el Ángelus, entre ellos el de la gorra que al parecer la había encontrado. Eran notablemente más jóvenes que nosotros, pero caminaban bastante más despacio.

Volvimos sobre nuestros pasos ya buscando restaurante, pero bajando de la Blanquilla el viento azotaba y el pinsapar estaba muy inclinado y lleno de matorral. Los Manueles, en la subida, le habían echado el ojo a un llanito apropiado en el puerto de los Amoladores y allí paramos.

Formamos un buen rolde. Algunos impacientes ni esperaron a que preparáramos los tomates para poner en marcha las fiambreras. Una comida como las usuales nuestras, de las que justifican la caminata realizada, y con vino más que suficiente. Echamos en falta la tarta de Jerónimo. Allí mismo se acordó que si Jerónimo faltaba iríamos a su casa a recoger la correspondiente tarta. Esto tiene el acostumbrar al personal a según qué delicias. Suplimos la tarta con unas galletillas y chocolate. No faltaron los tés y los orujos para finalizar la fiesta.

Con el viento casi en calma regresamos al puerto de la Madera, tomamos la senda de frente, la de la Jácara. Al llegar al carril estaba el grupo que había subido al pico de la Prieta, los que habíamos encontrado en el puerto de la Madera en la mañana. Allí tenían los coches. Eran también mucho más jóvenes que nosotros, pero por lo visto también caminaban menos. De allí a Casarabonela hay un buen trecho y 450 m de desnivel.

Una cervecita en Casarabonela y a casa.

Un par de orquídeas encontramos: Oprys tenthredinifera y Bartlia robertiana

SALIENDO DE CASARABONELA

INICIANDO LA SUBIDA

EN EL LLANO SAN CRISTÓBAL

EN LA FUENTE DEL HORNAO

PRECIOSA VISTA DE LA SIERRA DE ALCAPARAIN

AFRONTANDO LAS RAMPAS MAS DURAS

EL LAPIAZ DE LA CIMA

UN POCO DE VERDE EN MEDIO DEL LAPIAZ

EL GRUPO EN LA CUMBRE DE LA SIERRA BLANQUILLA

ESPECTACULAR CIELO

FOTO DE ARTISTA

INICIANDO LA BAJADA

PINSAPOS AL LADO DE LA SENDA

EL RESTAURANTE

LLEGANDO AL LLANO DE SAN CRISTOBAL POR LA SENDA DE LA JÁCARA

DE NUEVO EN CASARABONELA