20 de enero: Sierras Prieta y Cabrilla

Participantes: 7	Jesús R., Paco P., Enrique, Jesús, Manu, Carlos y Jerónimo
Distancia recorrida:	20 km
Desnivel de subida acumulado:	1.500 m
Punto más bajo del recorrido: Casarabonela (480 m)	Punto más alto: Vértice de Sª Prieta (1.512 m)
Tipo de recorrido:	Tramos circulares que alternan con tramos de ida y vuelta.
Tipo de camino:	Veredas principalmente, con un pequeño tramo de carril de tierra y las calles del pueblo.

Afluencia escasa porque la gripe-catarros fuertes están haciendo estragos entre los caminantes. Después presumiremos de estar fuertes.

Desayuno en la panadería-pastelería de Casarabonela. Tuvimos la ocurrencia de pedir molletes con aceite. Nunca lo hubiéramos hecho. Nos sacaron una masa sin cocer, pastosa, que ni con el suavizante del aceite pasaba por el gaznate. Si volvemos hay que pedir otro tipo de pan.

Salimos por la plaza de la iglesia callejeando hacia el cementerio, en un día luminoso, con buen temperatura, pero con viento. La cañada de subida al llano de Cristóbal nos protegía del viento, pero cuando subimos al llano se mostró con toda su intensidad. A pesar del viento nos acercamos al mirador del llano y sacamos unas fotos de la bahía de Málaga, de los pueblecillos del valle del Guadalhorce y del mismo Casarabonela.

Echamos por la senda de la Fuente del Hornajo. La atracción del día era la cámara nueva de Carlos. Y en torno a ella, a sus prestaciones, a su diseño, a su precio, a su búsqueda de la mejor oferta…, giraban las conversaciones. A la fuente del Hornajo no se puede acceder. Las zarzas han crecido muchísimo y lo impiden. Subimos al carril y por la sendita al puerto de la Madera. Hubo poca discusión para decidir subir al pico de Sierra Prieta, y a ello nos pusimos siguiendo la senda que corta el pico por el noreste para llegar al colladito de la cresta al este por donde se accede. En el colladito el viento nos llevaba y siguió castigándonos con fuerza, inclemente, en todo el trayecto de subida al pico. Por cierto, hay marcada vereda durante todo el tramo.

En el pico, curiosamente, estábamos completamente resguardados del viento. Charlamos con un caminante pizarreño que encontramos y aprovechamos para hacer la paradita del Ángelus y reponernos de la paliza del viento en la subida. Cresteamos para buscar la bajada al oeste del pico y muy despacio, con mucho cuidado, siguiendo más o menos los hitos, descendimos sin novedad por esa tremenda pendiente, salvando algún tramo destrepando. En el colladito entre Cabrilla y Prieta están perfectamente marcadas las sendas hacia los barrancos de Siete Fuentes y las Doncellas. Tomamos al norte, por el de las Doncellas, disfrutando del buen piso después de la inestabilidad de la bajada.

Por la senda del norte de Sierra Prieta ascendimos al mojón de los Tres Términos, pasamos la verja que protege a la repoblación de pinsapos, y junto a algunos ya grandes subimos al collado de los Pilones entre las sierras Cabrilla y Blanquilla. Poco más abajo del collado parte una senda de montañeros por la falda de la Blanquilla hacia la cresta y en la cresta aparece la senda antigua al colladito herboso y luego hasta la meseta superior de la sierra.

Azotados por el viento, atravesamos el conocido lapiaz buscando el montículo pedregoso que indica la indefinida cumbre de la Sierra Blanquilla. En el montículo el viento nos llevaba literalmente, así que fue llegar, hacer una foto, y emprender el regreso buscando algún abrigo para almorzar. Lo encontramos junto a una dolina y allí, completamente a resguardo del viento, sacamos aperitivos, ensaladas, tortillas y albóndigas que pasamos con un par de botellitas de Campo de Borja y La Mancha, mejor el primero que el segundo. Quesos, tés y pan de higo con almendras pusieron fin a la comida.

Volvimos por donde vinimos al barranco de las Doncellas, al puerto de la Madera y por la senda al noreste, cerca de la cresta de la cordillera, bajamos a la pista y a la senda de la Jácara. Después de la pista hay un cruce de sendas. Se ha de tomar la que va el este, por el lomo, porque la que va al norte baja al cauce del barranco y sube otra vez hacia el carril.

Día marcado por el viento y por la hazaña, pocas veces consumada, de llegar a los picos de las dos sierras. Quizá ayudara a ello la ausencia de flores que propician las consabidas paradas. Solo vimos una campanilla, quizá la Campanula semisecta, en el muro bajo el cementerio, y la vidalba que estaba esperándonos en la cañada del Hornajo.

Campanula  semisecta

Por el Llano Cristóbal 

Clematis cirrhosa - Aján

En el Pto. de la Madera

Pasando por un collado

Subiendo hacia la cima de Sierra Prieta

Sierra de Alcaparaín desde la cumbre

Últimos metros para llegar a la cima

Desde el vértice de Sierra Prieta

Foto de grupo

Descendiendo entre abruptos peñascos

Cara norte de Sierra Prieta

Buscando la sendilla apenas marcada

Otra imagen de la vertical cara norte de Sierra Prieta

Un paso delicado

Collado de los Pilones

Pasando una pradera

Perspectivas

La cima de Sierra Blanquilla o Cabrilla a la vista

En uno de los vértices de Sierra Cabrilla

Vinos

De vuelta

Hacia el Collado de los Tres Términos 

Atardeciendo en la bajada hacia Casarabonela

Nubes rojas al caer la tarde