domingo, 26 de marzo de 2017

24 de marzo: Robledal - Pico de la Tejeda

Participantes: Jorge y Bea, Augusto y Charo, Victoria, Manolo de Alcaucín, Pepe, Antonio Usieto, Miguel y Jesús; y Darwin-Bigotes.
Distancia recorrida: 16,8 km
Desnivel acumulado: 1100 m

 
Una calurosa bienvenida de la Vinoteca para nuestros amigos granadinos: Jorge, Bea, Augusto y Charo; y a Manolo.

Las previsiones del tiempo eran malas: lluvia a partir de las 11 y frío desde por la mañana. Como para no salir. Pero el que se siente montañero va a sus caminatas bastante independientemente del tiempo. Y allá que fuimos.

Nos juntamos en La Alcaicería y de allí al Robledal Alto. Toda la explanada que solemos emplear para aparcamiento estaba llena d ramas y troncos, tractores y camiones. Estaban realizando una buena entresaca de pinos y cedros, y esa zona era el lugar de acopio de la madera. Aparcamos detrás, al lado del área de acampada, y de allí comenzamos por el carril a los Barracones entre árboles caídos, ruido de motosierras, y mulos y caballos acarreando troncos.

Comenzábamos con tiempo agradable, frío pero sin viento, y poco nuboso. Pasamos por los corrales de Martín, por el Contadero, y en el cerro de los Pilones paramos a recuperar el resuello y a contemplar el panorama. Arriba, por el pico de la Tejeda, comenzaba a nublarse. Por los collados de Rojas ya la niebla había cubierto las cumbres desde la Lobera hacia arriba y el frío se dejaba sentir. Con el acicate del frío subimos con rapidez por el Salto del Caballo y en la Lobera comentamos si meternos en la niebla y seguir, a sabiendas de que no tendríamos visibilidad alguna, o volver. Decidimos seguir. ¿Quién dijo miedo?

Claro, perdimos las preciosas vistas de Tajo Volaero y agrupados para no despistarnos, entre la niebla, llegamos al monolito del Pico de la Tejeda un poco antes de las 12. Estábamos a - 4,4ºC. Las fotos de rigor junto al monolito, una visita rápida a la sima de la Maroma y vuelta por donde habíamos venido con algunos copitos de vez en cuando.

Antes de llegar a la Lobera decidimos visitar la Tacita de Plata pues Manolo fue el albañil que la preparó junto con Pedro Aguilar. Nos explicó la obra y el esfuerzo de subir hasta allí cargado con los materiales y las herramientas. Volviendo de la Tacita comenzó a nevar con rasmia. Eran unos copos esféricos, novedosos para todos. Parece que se forman por acreción al tocar un copo gotitas de agua sobreenfriadas. La nevada fue a más mientras bajábamos por el Salto del Caballo, cubrió todo el suelo rápidamente y en ese entorno frío, silencioso, con el repiqueteo de los copos en el impermeable y el crujir de la nieve bajo las botas, nos sentimos dichosos de disfrutar una más de las maravillas de la Naturaleza.

Antes de los corrales de Martín dejó de nevar, salió el sol y con él llegamos hasta los coches que tenían también su capita de nieve.

Y con los coches a Alcaucín, a casa de Pedro, donde nos esperaban hacía rato Pedro, Paco, Antonio de Fornes, Miguel y María Jesús. Preparamos los aperitivos, se sirvieron las migas, se abrieron cervezas y vinos, todo en un ambiente estupendo de camaradería. Las migas se acompañaron de ensalada cateta, jamón, gambas, morcilla, ajo bacalao, tomate, aguacate, pan casero de Antonio…, y quizá alguna cosa más. Con ese ambiente la candela ni se necesitaba, aunque allí seguía crepitando.

Estas reuniones son germen de otras. Y así paso. Jorge anunció que tenía preparada una rutita por las acequias entre Mecina y Yegen con parada posterior en su casa. Tomamos buena nota y con ese señuelo en perspectiva nos dimos un abrazo y cada mochuelo a su olivo.
 
Debajo del Contadero
 
El grupo en el Cerro de los Pilones
 
En el Collado de Rojas
 
Hacia el Collado Loberas
 
En el Pico de la Tejeda -4ºC
 
Nieva bajando de La Lobera
 
Por la senda bajo en Salto del Caballo
 
Sigue nevando
 
Por el pinar nevado
 
En los Corrales de Martín con sol
 
Preparando el ágape en casa de Pedro
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario