miércoles, 16 de octubre de 2019

19 de octubre: Parador del Juanar - Sª Canucha


Participantes: 7
Paco P., Jesús R., Pilar, Ana, Paco R., Luis  y Jerónimo
Distancia recorrida:
15,4  kilómetros
Desnivel de subida acumulado:
1.070 metros
Altura mínima: (730 m - Casa Pula)
Altura máxima: (1.238 m – Pico Castillejos)
Tipo de recorrido:
Circular
Tipo de camino:
Veredas y un pequeño tramo por carretera.

 
 
Tarta escocesa de mermelada de naranja amarga, kumquats y pistachos caramelizados

Amarga
Es temprano. Escasamente las nueve cuando echamos a andar. El sol hace media hora que nos acompaña… y el calor, en la subida, se hace incómodo, como ese sube y baja del camino, del sendero que tras subirnos al cielo  del Pozuelo, nos baja al averno derruido de la Casa de Pula. ¡Todo lo que hemos subido lo hemos bajado! Y eso duele, tanto como el calor, tanto como el color ausente del otoño.  
Son las diez y nuestras miradas se dirigen a los contrafuertes de Sierra Canucha que otean el Mediterráneo desde las alturas. Un  infernal sendero araña las piedras para encaramarse sobre nuestras cabezas y allá vamos, testuz inclinada y sin hablar porque falta el aire e hiere hasta el aliento.

Ácida
Ángelus. Puerto de la Tejuela y Alto de Canucha. Las vistas se abren a la inmensidad del paisaje y sus contrastes: por un lado, el bosque de Albornoque, verdor, soledad, desconocido, coronado de calizas y peridotitas, Torrecilla, Sierra Real, Cerro Corona. Por otro, el mar y su costa construida, constreñida, reducida a un amasijo de pintura y hormigón y el fértil Guadalhorce punteado del blanco sucio de la incontrolada construcción.  
El sendero se desliza por la cresta. Un viento fresco va trayendo nubes que como barcos surcan el mar en su reflejo o anclan su vapor en las montañas. El sendero baja, abandona las alturas que cortan Los Cuchillos, bellos, agrestes e  inaccesibles, y se interna en una cara norte herida por el fuego tiempo ha y apenas recuperada. El sendero sube. Y vuelve a bajar y cuando decididamente se le ocurre volver a subir (¡manos para qué os quiero!) un golpe de viento derrumba mi gorra y vuela hasta los pies del gigante Castillejos, desde donde la afilada cresta corta el aliento.
La democracia es un juego de persuasión y engaño. Toca enarbolar la belleza del bosque de pinos de Monterrey y del denostado eucalipto, con su corteza descarnada y multicolor, y callar a la vez la subida que es mentir.

Dulce
El desayuno y la inesperada aparición de Paco Ruiz: Y no lo digo por las pasas de la Axarquía y sus sabrosos mostachones de Vélez, que también.
El cambio de tiempo: Y no lo digo por los cielos azules teñidos de blanco que pasaron a grises, ni por esas gotas de lluvia que no fueron cerveza, que también.
La belleza y salud de los pinsapos de Sierra Canucha: Y no lo digo por la soledad del camino y el silencio que solo el aire en sus ramas rompía, que también.
La comida: y no lo digo por la pipirrana de pulpo, las verduras asadas, el pollo al curry o la ensalada malagueña, por el vino de Cuenca y el queso manchego, que también.
Por la dulce compañía, en la ausencia, también.

Mapa de la ruta
 
Los contrafuertes de Sª Canucha
 
Llegando a la Casa de Pula donde se le fue la z
 
El camino sube
 
hasta hacerse vertical
 
Las vistas se abren
 
en una panorámica
 
En el Pto. de la Tejuela
 
Cresteando
 
con un horizonte
 
de cielos azules
 
y Cuchillos
 
afilados
 
El bosque de Albornoque y el Torrecilla
 
Cañadas de sube y baja
 
Pinsapar de Sierra Canucha
 
Sorteando el roquedo para llegar
 
al Pico Castillejos
 
con vistas a Los Cuchillos
 
Vino y pinsapos
 
Por el pinsapar del Pozuelo
 
Un saltamontes raro raro
 
Última subida
 
Bosque de pino de Monterrey
 
Sombras bajo los pinos piñoneros
 
La belleza del denostado eucalipto

6 comentarios:

  1. Jerónimo, ¿esta ruta es la misma que hicisteis en abril del 2016?

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    Respuestas
    1. No exactamente. Es más corta y con menos desnivel ya que no salimos de Ojén sino del Juanar.

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  2. Me apunto. Jerónimo, ya me das indicaciones por favor.

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  3. Jerónimo, ¿a qué hora podrías recogerme?

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  4. Voy. Luis, donde siempre a las siete y veinte.
    Ana, en el Faro, a las siete y media.

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