miércoles, 7 de diciembre de 2016

Sábado 10 de diciembre: El Lucero

Participantes:  10
 Paco Ruiz, Gerardo, Lola D., Manu, Luci,  Paco Z., Manuel Díez,  Jesús C. , Ricardo y Jerónimo
Distancia recorrida:
22,2 kilómetros
Desnivel de subida acumulado:
1.300 metros
Altura mínima: (700m -Fábrica de la Luz de Canillas de Albaida)
Altura máxima: (1.779 m -Pico del Lucero o Raspón de los Moriscos)
Tipo de recorrido:
De ida y vuelta, con un pequeño tramo circular.
Desayuno en el bar Manolo de Caleta: cafés, vienas tostadas, aceite, tomate y churros de postre. Otra vez los churros hay que pedirlos antes porque esperándolos hemos salido del desayuno casi a las ocho. 2,3€
Bienvenidos Gerardo y Manu, nuevos en el grupo y a Lola Díaz que viene a caminar menos de lo que nos gustaría. Gerardo y Manu caminan bien y Lola iba que se salía, ¡qué potencia!¡qué ritmo! Impresionante.
La mañana estaba tranquila, sin viento, con el cielo limpio y azul. Deliciosa para comenzar la caminata. Y allá fuimos cruzando el arroyo de la Gallega que venía crecido y luego por su vera entre sauces y adelfas. De la desembocadura del barranco Borriquero hacia arriba el arroyo pasa a denominarse de la Cueva del Melero y poco más arriba se queda casi sin agua.
Los perros del Chato nos saludaron, como siempre, con esa tremenda sinfonía de ladridos que con el eco parecían venir de la Cueva del Melero más que del cortijo. Entramos en el arroyo y subimos por el carril del cortijo del Chaparral, saludamos al alcornoque abuelo y volvimos al cauce del arroyo. Al pasar por el cortijo Camacho íbamos hacia el cortijo pero Jerónimo siguió la buena senda y todos la recuperamos de nuevo. Menos mal que hay alguien que se fija.
La subida nos hacía sudar en esa mañana calma pero no apetecía desprenderse de la ropa por la frescura y la humedad de la umbría. Cuando llegamos a Puerto Blanquillo la cosa cambió. Recibimos el sol con alegría y ya pudimos quitar alguna capa.
La cantera debajo del cerro de los Frailes siempre nos sorprende por la blancura del mármol y la perfección de los cortes. Aunque hace años que ya no se explota, los cortes de la roca siguen blanquísimos. Cambiamos el carril a la Resinera por la sendita al Lucero por la loma de la Mota y antes de llegar al colladillo bajo el cerro de Rajas Negras paramos al Ángelus. En la fresca umbría no apetecía estar mucho tiempo, así que enseguida continuamos la subida.
La brisa de levante iba metiendo nubes en la ladera sur, nubes que llegaban a la cumbre del Lucero y que temimos nos impedirían disfrutar de sus excelentes panorámicas. Afortunadamente no fue así. Las nubes estaban en una capa más baja que la cumbre y hacia el norte y noreste todo estaba despejado. ¡Qué bonita estaba Sierra Nevada con su gran manto blanco contrastando con el azul del cielo! No nos cansábamos de admirarla.
En el Lucero las fotos de rigor y vuelta abajo. Como no hay flores, no hay paradas y se camina bastante más deprisa que cuando las hay. Por eso pronto estuvimos en Puerto Llano. Como allí siempre hay viento traspusimos el collado de la Perdiz buscando un carasol abrigado. Lo encontramos en el comienzo del barranco de la Mota y allí nos sentamos a comer. Esta vez con más calma que otras fueron saliendo las fiambreras y de ellas la chacina de aperitivo, la rica ensalada, las verduras, tortillas, carne y los consabidos quesos acompañados de membrillo hoy. Hubo una selección de vinos digna de la Vinoteca. Comenzamos por un Bancal de Fornes, seguimos con uno de Ronda, terminamos con un Rioja y aún quedó un navarrico sin estrenar. Luego los tés, los orujos, el chocolate y las pastas de Alhama.
A duras penas volvimos al camino y con la alegre charla que la buena comida propicia desandamos lo andado hasta Puerto Blanquillo. Por situar en el mapa el carril de acceso al cortijo del Chaparral echamos la vuelta por la pista hacia Canillas, a buen ritmo porque las tardes son cortas. El carril de acceso al cortijo baja por la cañada Rubitín y es increíblemente empinado. Por eso han tenido que hormigonarlo, y nos tememos que dentro de pocos años, cuando los del cortijo del Chaparral ya no vayan, las aguas lo arruinen dejando su cicatriz en la ladera.
Al entrar en el bosquecillo de ribera del arroyo de la Gallega la luz del atardecer se fue de repente y casi a tientas continuamos junto al arroyo, haciendo los cruces del arroyo lo mejor que pudimos, hasta desembocar en la Fábrica de la Luz. Afortunadamente nadie cayó al arroyo.
Día magnífico para caminar por esta bonita ruta al Lucero. Con gusto invitamos a Gerardo y Manu a volver cuando quieran y a Lola a que lo haga más a menudo.
 
Mapa de la ruta
 
Por el adelfal del Arroyo de la Gallega
 
Últimos coletazos del otoño
 
Repecho de salida al carril de Pto. Blanquillo
 
Sendero labrado en la roca
 
Grupo en el Pto. de Cómpeta
 
Subiendo la Loma de la Mota
 
Por la vereda, con el Cerro de la Chapa de fondo
 
Camino del Lucero
 
Cerca de la cima
 
Llegando al Lucero
 
por encima de las nubes
 
Grupo en el Lucero
 
Acentor alpino - Prunella collaris

En descenso
 
La niebla va y viene
 
El Lucero y el Lucerillo
 
Vinos
 
Sª Nevada como telón de fondo
 
Y nos pilló la Luna (o casi)

13 comentarios:

  1. Uno que se apunta. Ya era hora que el tiempo nos dejara salir el sábado

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  2. Me apunto. Saludos. Paco Ponfe.

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  3. Iré y estaré pendiente de los coches del oeste.
    Paco Z.

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  4. Estaremos en la plaza Manu y yo.

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  5. Yo también me apunto.Espero que la subida no sea por los Hornillos....
    Jero o Paco me podréis recoger?
    Un abrazo montañero

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  6. Paco Z., te recojo a las siete menos diez en el Limonar.
    Lola D., a las siete menos cinco en donde siempre en el Rincón.

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  7. David.si no me quedo frito voy al desayuno directo.

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