Participantes: 18 | Paco Ruiz, Ricardo, Jesús C., Pili, Carmen, Javier, Antonio Muñoz, Fini, Jerónimo, Tere, Mª José, Pilar, Paco Ponferrada, Jesús R., Paco Zambrana, Lily, Mª Victoria y Manuel D. |
Distancia recorrida: | 14,6 kilómetros |
Desnivel de subida acumulado: | 560 metros |
Altura mínima: (1.230 m – Fte. de la Teja) | Altura máxima: (1.606 m – Cerro del Corzo) |
Tipo de recorrido: | Básicamente Circular, con un par de tramos de ida y vuelta |
Tipo de camino: | Carriles y senderos. |
Llano del Fraile - Fte Teja - Cerro Corzo - Casa de las Minas
Desayuno en Alfacar en el bar Lozano. Buenas medias tostadas con aceite y acompañadas de tomate y jamón. 3€.
Estas caminatas en las que nos
juntamos granadinos y malagueños siempre comienzan con abrazos y charlas
propias del reencuentro. Así fue también hoy con el detalle de que, en el Llano
del Fraile, donde comenzamos a caminar, estábamos a -1,5ºC.
La fría temperatura hizo que
tomáramos la pista al este por los Llanos del Fraile con alegría, a buen paso
para entrar en calor, en grupitos con animadas charlas, llevando a ambos lados
el pinar salpicado de cedros, robinias, arces, etc. fruto del capricho de los
repobladores.
Dejamos la pista por un carrilillo
a la derecha hacia la pista entre la Alfaguara y el Sanatorio. Va el carrilillo
por una cañada, metido bajo el denso pinar de pino resinero, subiendo
suavemente, hasta dar con el carril al Sanatorio. Justo enfrente de donde
termina el carrilillo comienza la cañada de la Cuna por la que bajaremos, pero
la dejamos para tomar a la derecha el carril de entrada al Sanatorio. Este carril
rodea al cerro Carboneras en cuya ladera sur se encuentra el Sanatorio, de modo
que siguiéndolo nos lleva siempre al Sanatorio, pero tomándolo a la derecha se
llega mucho antes.
El sanatorio de Doña Berta recibe
al visitante con dos hermosísimos cipreses de Portugal (Cupressus lusitanica)
oriundo, no de Portugal a pesar de su nombre, sino de la zona entre México y
Costa Rica. Detrás, orientado al sureste, bajo el cerro de las Carboneras, está,
parcialmente reconstruido, lo que debió ser un bonito edificio a juzgar por las
formas y terraza que aún exhibe. Fue un sanatorio antituberculoso construido
altruistamente por doña Berta Wihelmi en 1923. En la Guerra Civil se clausuró y
abandonó. Hoy se conoce como sanatorio de la Alfaguara. Se dice que en el
edificio se producen apariciones de una señora vestida de blanco, de un cura
alto y delgado, de unos perros…
Volvimos sobre nuestros pasos
para entrar en la cañada de la Cuna, descendiendo muy suavemente, al sur y al
este, por el tupido pinar. En el primer desvío dejamos a la derecha la senda
que sigue por la cañada de la Cuna para seguir de frente, subir un pequeño
colladito y entrar en otra cañada, al este, con un fuerte descenso por una
senda descarnada por los arrastres de las aguas.
La cañada termina en la Fuente de
la Teja con un hermoso chorro del que algunos aprensivos no quisieron beber. En
la Fuente de la Teja principia el río Darro hacia abajo, fruto de la unión de
los barrancos Polvorite y de la Hoz. Tomamos la pista a la izquierda, paralela
al Polvorite, barranco que dejamos momentáneamente para rodear el cerro del
Púlpito y volver otra vez a él a través de la majada del Púlpito. En la majada
bromeamos un poco con la posibilidad de subir al Púlpito por la empinada ladera
del norte. Al final se impuso la cordura y dejamos el Púlpito para entrar otra
vez en el valle del Polvorite.
La senda abandona el Polvorite
hacia el norte comenzando a remontar la ladera y la loma hacia el cerro del
Corzo, dejando a la izquierda el promontorio de cerro Garay. Al principio la
senda sube suavemente pero luego se empina más mientras va dejando el bosque
abajo y va acercándose a la caseta contra incendios del cerro.
El cerro del Corzo está casi en
el centro del parque natural Sierra de Huétor, con unas vistas preciosas a todo
el parque, a los pinares, a las cañadas y crestas de su intrincada orografía y
a la blanca Sierra Nevada al sur. Unas vistas maravillosas que disfrutamos a placer
en esa mañana clara, serena y apacible.
Saciado el ánimo con la belleza
de las vistas tocaba saciar el estómago con las delicias escondidas en las
mochilas. Antonio sugirió bajar a las ruinas de la casa forestal de las Minas
para almorzar. Descendimos del cerro del Corzo, hacia el oeste, por la parte
opuesta a la de subida, para alcanzar el carril del Cerro del Corzo que termina
justo a su pie. Entramos de nuevo en el variado pinar de pino resinero,
silvestre y negro, para desembocar en el despejado llano de la Mina donde
quedan las ruinas de la casa forestal.
Los tradicionales ágapes de la
Vinoteca se hacen inenarrables cuando nos juntamos tanta gente. Se prepararon
cantidad de ensaladas, muchos tipos de chacinas, gambitas, varios tipos de
tortillas, algunas verduras y riquísimo solomillo de cerdo con ajitos; después
los quesos tierno y duro. Lo que menos hubo fue vino: una botella del Bierzo,
otra de Cádiz y una tercera de Extremadura. No obstante, llegó mal que bien.
Dulce de membrillo, quesadilla, brownie y tarta de queso y mandarina para
terminar, con multitud de tés, lo que faltó de vino sobró de té, y orujos
blanco y de café. Una comida completísima.
A duras penas dejamos la soleada
pradera de la Mina para continuar por el carril del Cerro del Corzo, al oeste.
En seguida desembocamos en la pista que desde los Llanos del Fraile va al este
por el arroyo de las Perdices. La tomamos a la izquierda, por encima de la
entubada acequia de Fardes. Dejamos a la derecha el carril al collado de Fardes
y al río Bermejo para continuar al oeste por la pista, disfrutando de la
refulgente blancura de Sierra Nevada entrevista a través del hermoso pinar,
para llegar a los Llanos del Fraile y a los coches.
Nosotros vamos
ResponderEliminarPaco Ruíz se apunta.
ResponderEliminarMe apunto, os espero en la gasolinera de Nerja
ResponderEliminarTambién iré.
ResponderEliminarLily se apunta también
ResponderEliminarJesús también irá a la sierra de Huétor. A las 7 en la Ortíz.
ResponderEliminarPerdón a las 6,45, no a las 7
EliminarVamos Tere y yo.
ResponderEliminarY yo. Ricardo
ResponderEliminarMª Victoria también se une a la caminata de mañana
ResponderEliminarMary Jo se apunta.
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