Participantes: 12 | Ana, Paco P., Jesús R., Jerónimo, Paco
Z., Manolo, Lucía, María José, Paco R., Antonio S., Ricardo,
Jesús C. |
Distancia recorrida: | 15,5 kilómetros |
Desnivel de subida acumulado: | 1.260 metros |
Altura mínima: ( 470 m – El Pinarillo ) | Altura máxima: (Sobre los 1.580 m – Ladera del Alto de la Cuesta del Espartal) |
Tipo de recorrido: | Circular con un tramo de ida y vuelta |
Tipo de camino: | Carril de tierra, veredas y pequeños tramos campo a través. |
Desayuno en la gasolinera de Nerja.
Tenemos un tiempo anticiclónico,
con viento de levante fuerte, que acumula nubes y alguna llovizna en el oeste
de la provincia. Por eso buscamos rutas por el este, como esta del Cielo.
En el desayuno y en el
aparcamiento del Pinarillo nos juntamos con uno de los grupos de La Bota
Viajera. Algunos de los nuestros conocían a otros de La Bota. Salimos juntos
por el carril del Pinarillo, pero al llegar al barranco de la Coladilla los
dejamos ir delante para caminar en grupos más reducidos. Iban a Navachica
subiendo por los Tajos del Sol.
La mañana estaba despejada, sin
viento, al menos en el fondo del barranco de Cazadores, y con buena
temperatura. Las flores de la violeta arbórea, del escobón y de la olivilla nos
dieron la bienvenida, acompañadas de las del romero y aulaga, aunque de esta
última no se pueda esperar nada bueno. ¡Con la sequía que tenemos y aún hay
alguna florecilla! Parece mentira. Con las flores y la vista de esos tremendos
paredones de la garganta del Cazadores este primer tramo es delicioso. Por
muchas veces que se pase siempre impresiona.
Al llegar a la primera salida de
la senda del fondo del barranco nos dividimos: Paco Ruiz y Manolo decidieron ir
por el fondo del barranco mientras que el resto, más conservadores, tomamos la
senda, si se puede llamar así al primer tramo que se perdió en 2007 y ahora
trepa por una cárcava pedregosa e incómoda; después ya en la senda tradicional,
el piso es bueno y las vistas excelentes. Aparte de la aventura, no tiene
ningún aliciente caminar por el fondo del barranco sin vista alguna.
El grupo caminaba a buen ritmo,
el que imponían Ana y Manolo, que habían salido con fuerza, pero cuando
entramos al barranco de la Encina el ritmo disminuyó por la maleza y la madera
acumulada en el fondo del barranco que dificulta el tránsito.
Y cuando entramos en el barranco
Serrano la elevada inclinación impuso su ley y todos tuvimos que reducir el
paso. Paramos al Ángelus en la llanura del Llano Hondero donde hay restos de
haber hecho fuego. No imaginamos quién puede venir aquí con ese propósito. Nos
sentamos aprovechando los rayos del sol y descansamos un poco mientras se
tomaban los mostachones, las pasas, los frutos secos, etc.
La senda desde aquí y hasta el
final de Lomas Llanas está muy poco marcada, casi siempre vamos por donde nos
parece, pero hoy hemos seguido bastante bien los hitos que la señalan. El track
de hoy puede muy bien servir de guía para futuras excursiones.
El tiempo había empeorado
notablemente. Entre Lomas Llanas y el collado de la Orza hubimos de echar mano
de abrigos y cortavientos porque el frío levante soplaba con fuerza, y lo que
es peor: acumulaba nubes en la cresta de la sierra por donde tendríamos que
caminar metidos en la niebla.
Incluso con la dificultad añadida
de la niebla en el puerto de la Orza nos dividimos: Paco Ruiz y Jerónimo dieron
la vuelta por el sur al cerro de los Piornos mientras que el resto subíamos por
la ladera a alcanzar el puertecillo entre el cerro de los Piornos y el Morrillo
de los Cabreros. Afortunadamente la niebla iba y venía y nos reencontramos con
facilidad, pero separar el grupo cuando hay niebla es algo que deberíamos
evitar siempre, máxime cuando entre los cerros de los Piornos y el de las
Minillas de Herrera está todo quemado, con la madera por medio y el matorral de
aulagas cerrando cualquier rastro de senda.
En el cerro de las Minillas de
Herrera la sendilla vuelve a estar marcada y de allí al Cielo caminamos sin
dificultad, con la niebla yendo y viniendo. En estos días de niebla, cuando se
abre, se disfruta más si cabe de las vistas, hoy hacia el espejeante azul del
mar y hacia la llanura costera.
En el Cielo paramos lo
indispensable para cuatro fotos: el viento y el frío nos hicieron seguir el
camino sin descargarnos siquiera de la mochila.
La bajada del Cielo por la loma
de la Columna se realizaba antes por la cresta que da a la Hoya de las
Lajillas. Desde hace algún tiempo se abrió una vereda de montañero que
facilitaba la bajada, pero con el auge del senderismo ahora se han abierto
muchas veredillas, algunas por zonas complicadas, y no es fácil seguir la mejor
senda. No obstante, en esta ocasión seguimos bastante bien la principal que es
la que transita por el “mejor” sitio.
Al llegar a la senda por el pie
del Barco paramos a comer en la llanurilla. Aperitivos de chacina variada,
aguacate, original ensalada de steak tartar, un par de ensaladillas rusas,
menestra, tortillas de berenjena, patata y chorizo, pollo empanado, filetillos
con ajos… y quién sabe cuántas cosas más. Cervecitas para el comienzo del ágape
y vinos del Campo de Borja (2), Rioja y de Gredos. Tarta de coco y mango, muy
buena, té y orujos varios. Todo tomado con la debida tranquilidad a pesar del
frío.
La bajada por la cuesta de la
Medialuna debe hacerse despacio para evitar resbalones. Y así se hizo mientras
contemplábamos la cresta de las Carabelas, cerro Molinero y el barranco del
Embudo a la izquierda, y a la derecha las ariscas puntas de los cerros de La
Maceta y Perruchino.
El tiempo había mejorado, el
viento casi cesado y la temperatura más alta.
Una buena caminata, con el tiempo
acompañándonos sólo en parte.
Yo me apunto.
ResponderEliminarYo tambien me apunto
ResponderEliminarMe apunto.
ResponderEliminarPaco, me recoges en la gasolinera de Algarrobo a las 7.35?
EliminarVOy.
ResponderEliminarIré al cielo por "el purgatorio".
ResponderEliminarPaco y Jesús.... Vamos
ResponderEliminarYo también voy
ResponderEliminarY yo. Ricardo
ResponderEliminarCon gusto iré al Cielo
ResponderEliminarMe apunto a caminar mañana.
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