Participantes: 8
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Paco Ruiz, Paco Ponfe, Pilar, Jesús, Ana, Paco
Zambrana, Lola V., y Jerónimo
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Distancia recorrida:
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7 kilómetros
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Desnivel de subida acumulado:
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250 metros
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Altura mínima: 390 metros (Carril, antes del puente)
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Altura máxima: 580 metros (Poza Central)
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Tipo de recorrido:
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Lineal, de ida y vuelta
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Desayuno en la gasolinera de Nerja a las 8,
alguna tostada con aceite perdida entre tanto bocadillo de jamón serrano, jamón
cocido y otras viandas.
Distancia recorrida y desnivel acumulado: imprecisos. Sabido es
que en los cañones el GPS no encuentra los satélites y al final no llegamos a
un acuerdo ni en la distancia ni en el desnivel.
Primero una precisión de nomenclatura. El Río Verde se forma por la
unión del Nacimiento y el barranco de las Chorreras. El Verde nos deleita con
su impresionante cañón en La Puerta, con sus caprichosas coladas de travertino
y por el canal que atraviesa toda la ladera izquierda, pero en él no solemos
bañarnos. El baño comienza en el barranco de las Chorreras.
Todos los participantes habían hecho el recorrido entrando por la
carretera y casi ninguno entrando por el carril de pago para hacer el recorrido
de abajo hacia arriba. Esta fue una excusa perfecta para ahorrarnos la caminata
vespertina por esa solanera inclemente del barranco de los Chortales.
En el carril de entrada había un lío notable con varias furgonetas
bloqueando la entrada mientras esperaban a parte de sus participantes en el
descenso del barranco. Al final el responsable de la cooperativa los mandó para
el río y se desbloqueó el acceso. Pagamos los 5 euros/persona y otros tantos
por el vehículo, y para abajo.
Dejamos, como siempre, los coches antes de La Puerta para
disfrutar del cañón del Verde pausadamente, a pie, como se debe hacer, pero
fuimos los únicos que elegimos esa modalidad, el resto llegaron con sus
vehículos tan arriba como pudieron. La sequía se nota. El río bajaba seco en La
Puerta, lo que restó un poco de vistosidad a la travesía de La Puerta pues
faltaba el agua despeñándose en esos angostos rápidos; los travertinos tan
atractivos como siempre y el canal en la ladera impresionante, vaya obra a base
de martillo, cincel y algún cartucho de dinamita.
La entrada al barranco de las Chorreras está un poco complicada
desde la tormenta de septiembre de 2007. Hay que bajar con cuidado por unos
pedruscos resbalosos y meterse agua a la cintura para pasar el barranco.
Salvado el primer escollo pasamos encima de la primera poza y ya en ella hubo
quien propuso darnos el primer remojón. Se impuso la cordura y lo dejamos para
el regreso. Atravesamos el puente colgante para enfrentarnos al repechillo que
lleva a la era y al segundo mirador. Resoplamos, regamos el suelo con el sudor,
y ya se empezaron a oír comentarios de que hacía mucho calor, de que no
habíamos venido a sufrir, de que eso no era la excursión que se esperaba en un
río… Estaba claro que había que aflojar el paso y en cuanto tocamos el río otra
vez nos metimos a refrescarnos. Un buen rato estuvimos en esa primera parada
mientras uno de los múltiples grupos barranquistas escuchaba la lección teórica
que precedía al corto descenso que iban a hacer; en algo tenían que
entretenerlos.
Pasamos por la hornacina donde desemboca el barranco Bernardino y
en la poza que precede al segundo puente colgante nuevo baño y larguísimo
Ángelus con uva, manzana, melocotón, mostachones, pasas… aunque sin vino dulce.
Todo lo que salió de las mochilas pasó a los estómagos mientras el agua nos refrescaba
los pies. Seguimos la caminata hasta la Poza Central. Lola y Paco Ruiz que iban
delante echaron por la cuestecilla del Lagarto, pero al resto nos hacía daño el
sol y decidimos acercarnos a la poza de la cascada y meternos entre la multitud
de barranquistas para observar sus rápeles y sus saltos. Hubo de todo, algunos
que salieron airosos y a otros que tuvieron que bajarlos atados a una cuerda. Y
nosotros observando y baño va baño viene.
Al rato aparecieron Paco y Lola. Habían subido un buen tramo de la
cuesta y al ver que nadie les seguía volvieron sobre sus pasos. Se unieron a
los baños y cuando nos cansamos buscamos un lugar llano a la sombra de los
mirtos, a la vera del barranco, justo debajo de la poza central. La primera
consigna fue que no teníamos prisa, así que con calma se preparó la ensalada,
los pimientos, el pan, el vino… y con la debida tranquilidad empezaron a correr
las tortillas varias, el chorizo, el salchichón, la ensalada, los pimientos,
las pochas, las costillas y quizá algo más. Poco a poco, con tiempo, fueron
llegando fiambreras y tuperwares vacíos a sus mochilas de origen. No quedó
nada. Las tres cervezas y las dos botellas también se nos hicieron cortas en
esa comida larga. Un vinillo de La Palma, pasable, y un buen monastrell. Después
la ronda de los tés y la siesta para reponernos del cansancio.
Aún nos dimos una zambullida antes de cargar con las vacías
mochilas camino de la poza debajo del segundo puente distante 10 largos
minutos. Nuevo baño y otro baño más antes de atacar el repechillo a la era.
Finalmente nos esperaba la poza debajo del primer puente donde también nos
dimos un buen remojón.
Bajando por el carril del Río Verde se podían ver amplias sonrisas
y caras de satisfacción. Todos íbamos contentos por haber disfrutado de un día
tranquilo, de relax, fresquito y los comentarios eran que debíamos darnos algún
caprichito más en vez de esforzarnos en llegar a las cumbres o recorrer sierras
con la lengua afuera.
Esta fue la salida final de temporada. La Vinoteca se ha vuelto
viajera y al grupo que nos dejó para ir a Georgia se va a unir el domingo el
grupo que va a Eslovenia, así que en Málaga no queda ya “grupo” alguno.
Retomaremos las salidas en septiembre.
¡¡¡Buen y fresquito verano!!!
Mapa de la ruta
Puente de entrada al Bco. del Río Verde - La Puerta
Travertinos
Llegando al paraje de la Junta de los Ríos
Lugar donde se unen los barrancos Nacimiento y Chorreras para dar lugar al Río Verde
Cruzando el barranco
Primera de las múltiples paradas para refrescarnos
No se resiste a un nuevo chapuzón
Por el sendero abierto en las paredes del Bco. de las Chorreras
Cruzando uno de los puentes colgantes sobre una poza
Barranquistas bajan en procesión: semana santa en julio
Baño en la Poza Central
Poza Central y cascada de la Y
Poza en el lugar del almuerzo
La sombra empieza a invadir el barranco
Explorando río arriba
Grupo en una de las eras-miradores
Crestas rocosas sobre el sendero
Cruzando un nuevo puente a la vuelta
Último baño
Gerris lacustris - Zapateros
Remontando unas rocas en la orilla del barranco
Presa
De vuelta por el carril
Pino y picachos sobre el río Verde
El barranco se estrecha en la zona de La Puerta
Me apunto. Paco Ruiz.
ResponderEliminarCon mucho gusto retornaré al "grupo de los sábados" después de tanto tiempo.
ResponderEliminarEstaré en la plaza a las 7.40
Lola Valle y Paco estarán en la gasolinera a las 8 para desayunar.
ResponderEliminarMe apunto.
ResponderEliminarA disfrutar del remojón!
ResponderEliminarUn saludo manchego.
Luis
Paco y Pili se apuntan
ResponderEliminarQue lo paséis muy bien , a ver si aflojan estos calores y me reengancho. Besos y abrazos a todos
ResponderEliminarVoy.
ResponderEliminarAna, ¿a las siete donde siempre?