martes, 1 de julio de 2014

Salida sábado 5 de Julio: Chorreras del Molinillo


Participantes: Pilar, Paco Ponferrada, Ana, Luci, Ricardo y Jesús
Distancia recorrida: 15,5 km
Desnivel acumulado: 850 m

Desayuno en el bar restaurante el Mirador. Bien.
El aparcamiento de los Albergues, lleno. Dejamos los coches en doble fila en el centro. Como se llegue más tarde de las 8.30 va a ser difícil aparcar en el futuro.

Habíamos programado ir a las Lagunas pero cambiamos de idea y fuimos a las Chorreras del Molinillo porque Pilar no las conocía. Además era más corta y requería menos esfuerzo. Pasamos por las instalaciones de Borreguiles y en el Llano del Aparato bajamos hacia un saliente rocoso desde el cual esperábamos ver la Chorrera en toda su amplitud. Pero…siempre hay un pero. Esta vez fue que no se veía el final de la cascada. Para conseguirlo pensamos bajar hasta situarnos encima del río frente a la cascada. Y allá fuimos por el piornal y la pendiente bajando de mala manera. Nada nuevo en la Vinoteca. En todas las excursiones tenemos un trecho de monte a través más o menos enrevesado.

Llegados al punto de destino conseguimos tener la cascada enfrente en toda su amplitud. Aunque traía menos agua que el año pasado estaba tan majestuosa como siempre, primero deslizándose por la roca con aparente suavidad y cayendo luego en tromba para ir a engrosar al Dílar.

Desandamos un poco el camino para pasar el Dílar con mayor facilidad y llegamos a la base de la Chorrera cuando Ricardo salía de la ducha de la cascada. Como ya somos viejos no nos escandalizamos con facilidad, pero motivos hubieron. Tomamos el Ángelus refrescados por la fina lluvia de la cascada e iniciamos el fuerte repecho para ir a lo alto de la Chorrera. Unos rebaños de vacas protegían la parte alta y tuvimos que sacar nuestros arrestos toreros para pasar delante de un toro negro zaíno y de otro colorado, bizco por más señas.

Nos quedaba lo más placentero, andurrear por los borreguiles y los regatos, acercarnos a los manantiales, chapotear por las partes encharcadas, disfrutar de esas flores ofreciendo sus múltiples colores y de esas mariposas revoloteando sin cesar. Alguien dijo que a nuestras edades no es que estemos viejos, sino crujientes, nos crujen las piernas, los brazos, la cintura, …y como estábamos refrescando el inglés por el viaje de Ana a Inglaterra, pues acuñamos el término de “crunchy women” y con él reímos un rato.

Almuerzo en el arroyo que sale del lagunillo del Cartujo, con chorizo del Almendral y cervezas fresquitas de aperitivo, ensalada de tomate, ensaladilla rusa, delicias de pollo, empanadillas, tortilla sin pimiento en honor de Ricardo, queso de Júrtiga, vinos de Navarra y Aragón, el tradicional brownie made in Ana y el delicioso té de Pilar.

Regreso tranquilo por la laguna de las Yeguas. Más tranquilo incluso de lo que hubiéramos querido porque dejamos pasar un rato para que marchase un gran grupo de jóvenes.

Día despejado, sin viento, fresquito en la altura, con agua a 13ºC en la ducha y a 4,5 en los manantiales, con magnífico ambiente. Excelente día.

 
Río Dílar y Chorreras del Molinillo
 
 Paco fotografiando al equipo femenino
 
Helecho - Criopteris fragilis
 
Arroyo a punto de caer por las Chorreras
 
Helecho - Polystichum lonchitis
 
Andurreando por los borreguiles
 
Mariposas
 
Viola palustris
 
Hacia la laguna de las Yeguas
 
Acentor alpino
 
Las Crunchy women y Ricardo en la nieve
 
Vinos

¿...?
 
 
Nevero y borreguil
 
Borregos buscando la frescura de la nieve


5 comentarios:

  1. Pili y Paco se apuntan al paseo por las alturas

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  2. Luci se apunta y estara en la plaza a la hora indicada.

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  3. Ya retorno a las buenas costumbres. Me apunto.

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  4. Yo me he retirado a los campamentos del norte y siento no poder acompañaros hasta el mes de Septiembre, que disfrutéis el verano Andaluz, yo haré lo mismo en el verano Leonés

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  5. Estaré en la plaza.
    Ricardo.

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